Según la líder de Cs, "a lo mejor, se lleva algún susto el señor Sánchez".
Aumenta la presión a Pablo Casado para que presente una moción de censura contra el Gobierno de Pedro Sánchez. A la petición que le ha realizado este miércoles el líder de Vox, Santiago Abascal, se ha sumado minutos después la presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas.
La líder naranja se ha dirigido a Casado durante su intervención en la sesión de este miércoles para reiterarle que "si presenta una moción de censura, no tenga ningún duda de que la apoyaremos".
Según Arrimadas, "a lo mejor se lleva algún susto el señor Sánchez". "Quizá algún apoyo parlamentario ahora tenga más difícil defender en sus territorios estos indultos y estás barbaridades que está haciendo el Gobierno", ha argumentado.
La líder de Cs ha explicado que considera que "mucho más útil" que la presente Casado en vez de Abascal "para debilitar al Frankenstein", la alianza de Sánchez con los que apoyaron su llegada a La Moncloa.
Arrimadas, durante su intervención, también ha cargado duramente contra Sánchez por "dar privilegios a nueve personas y olvidar a siete millones y medio de catalanes", en referencia a los golpistas indultados.
"Solo consigue votos cuando miente", le ha dicho a Sánchez, al que le ha recordado que "su palabra no vale nada. Y hoy se lo ha dicho hasta su socio Rufián", ha puntualizado Arrimadas recordando que el portavoz de ERC se ha mofado de la promesa del presidente del Gobierno de que "no habrá referéndum".
El líder de Vox reclama a Casado que "busque los apoyos necesarios" y "no la dé por perdida".
El líder del PP no ha hecho referencia a la posibilidad de que su formación presente una moción de censura en su primera intervención.
El órgano fiscalizador rechaza las alegaciones de los dirigentes separatistas, que planean recurrir a la "caja de solidaridad".
El presidente explica los indultos en su última comparecencia antes del verano. Defiende esta vía pese a que "no hay garantías" de su éxito.
Sánchez ofrece a Aragonès presidir ambos la mesa de diálogo en septiembre y le insta a abrir un "diálogo en Cataluña" sin mencionar un referéndum.
Para cualquier lector de la prensa barcelonesa el Tribunal de Cuentas de España es un chiringuito rancio, cutre, técnicamente insolvente y clientelar.
Cataluña será más temprano que tarde independiente, dicen, pero desde luego no lo será con su dinero.