Más buenas noticias para los presos por el golpe de Estado separatista de octubre de 2017. La titular del juzgado de Vigilancia Penitenciaria número 5 de Barcelona ha abierto la mano a los permisos de tres días a pesar de los duros informes de la Fiscalía en contra de las solicitudes de los Jordis, Cuixart, presidente de Òmnium, y Sànchez, expresidente de la Asamblea Nacional Catalana.
Así, ha autorizado el permiso de 72 hora solicitado por Jordi Cuixart y que fue informado positivamente por la Junta de Tratamiento Penitenciario de la cárcel de Lledoners, dependiente de la Generalidad. Según la jueza, el cumplimiento de una cuarta parte de la pena y la buena conducta del preso son motivo para acceder a la petición de permiso.
La Fiscalía se opuso a la concesión porque el reo no muestra el más mínimo arrepentimiento, manifiesta por activa y por pasiva que "lo volvería a hacer" y presenta "distorsiones cognitivas resistentes al cambio". En el informe se apuntaba además que la concesión de permisos es una posibilidad y no un derecho.
En cambio, la juez considera que el "lo volvería a hacer" del que se jacta el preso es una "mera expresión de pensamiento ideológico/político", que el preso se caracteriza por su buena conducta y que no hay riesgo de reincidencia. También apunta la magistrada que Cuixart reconoce los hechos delictivos, si bien no está de acuerdo con su calificación jurídica y que la normativa penitenciaria no impone la condición del arrepentimiento, de modo que autoriza la concesión del permiso, decisión que es recurrible por la Fiscalía ante la Audiencia de Barcelona.
Al margen del permiso, tanto Cuixart como Sànchez se benefician del artículo 100.2 del Reglamento Penitenciario, de modo que el primero puede salir a trabajar durante nueve horas y media a su empresa de empaquetamiento de medicinas y Sànchez dispone de salidas tres días a la semana para tareas de voluntariado no especificadas.
El informe subraya que el preso manifiesta "distorsiones cognitivas" y reprocha a la prisión que no tenga un programa específico de tratamiento.
Condenado a nueve años de prisión por sedición sale de prisión después de 822 días.
La Junta de Tratamiento les aplica el artículo 100.2 y abre la vía para extender el beneficio al resto de presos golpistas.
Jordi Sánchez yJordi Cuixart tendrán dos días de permiso tras la propuesta de la prisión donde cumplen condena.