El Consejo de Ministros, el primero tras la configuración del nuevo Gobierno, ha aprobado este martes la subida para este año de las pensiones en un 0,9%, que afectará tanto a las pensiones contributivas como no contributivas y de clases pasivas y que tendrá carácter retroactivo desde el 1 de enero.
Esta subida del 0,9% coincide con la estimación media del IPC, según ha detallado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que ha destacado además que con esta medida se cumple el compromiso de que los pensionistas no pierdan poder adquisitivo. Sánchez ha asegurado que esta medida irá dirigida a "10 millones de pensionistas".
Desde Moncloa han informado de que esta subida "se aplicará en la nómina de febrero e incluirá los atrasos de enero".
De hecho, Sánchez ha subrayado que si el IPC supera este año el 0,9% previsto, el Gobierno compensará a los pensionistas la diferencia en un único pago que se producirá antes de abril de 2021.
Es el segundo año consecutivo, tras 2019, en el que las pensiones aumentan por encima del mínimo legal previsto (0,25%). El año pasado se incrementaron un 1,6% con carácter general y un 3% en el caso de las mínimas y no contributivas.
Así quedarán las prestaciones:
El coste de esta revalorización asciende a 1.406 millones de euros, de los que 1.229 millones de euros corresponden a la subida de las pensiones contributivas, 144 millones a la de clases pasivas, 23 millones de euros a las pensiones no contributivas y 10 millones de euros a las prestaciones familiares por hijo a cargo, que también se revalorizan un 0,9% en 2020.
Por otro lado, Sánchez ha confirmado que el Ejecutivo negociará con la Comisión Europea una nueva senda de déficit, toda vez que las "circunstancias económicas y políticas", tanto en España como en Bruselas, han cambiado".
"La coyuntura económica ha cambiado, y también la estabilidad presupuestaria, y ha cambiado la Comisión en Europa y el comisario económico y, por tanto, tenemos que negociar con ellos la nueva senda de estabilidad, porque las circunstancias políticas y económicas han cambiado", reiteró el jefe del Ejecutivo.
En este momento, el compromiso de déficit que pactó en la pasada legislatura el Gobierno de Sánchez contempla un déficit del 1,1% para este año (un 1,7% a políticas constantes), que es la cifra que ahora se quiere renegociar con Bruselas, así como el horizonte para los próximos ejercicios. Para 2019, el objetivo era cerrar con un déficit del 2%, dato que aún no ha aportado el Gobierno, si bien casi todos los organismos nacionales e internacionales dan por seguro que este cifra será superior.
Fuentes del Ministerio de Hacienda indicaron ayer que además de negociar una nueva senda de déficit, el Gobierno pretende aprobar a partir de febrero el techo de gasto para 2020, paso previo al proyecto de Presupuestos Generales del Estado, con la intención de poder aprobar las nuevas cuentas públicas cuanto antes, toda vez que los Presupuestos de 2018 se han prorrogado por segunda vez.
Las mismas fuentes señalaron que la intención del Gobierno es poder "flexibilizar" la senda de déficit, que normalmente se fija para tres ejercicios, y conseguir un mayor margen para este año, ya que la meta de déficit oficial en 2020, aprobada por el Gobierno de Mariano Rajoy, es del 0,5% del PIB, si bien el Gobierno de Pedro Sánchez, que no ha podido aprobar aún ninguna senda ni ningún techo de gasto, comunicó a Bruselas que estimaba un desajuste del 1,1% del PIB, que podría alcanzar el 1,7% del PIB a políticas constantes.
La senda oficial de Rajoy proyectaba estabilidad presupuestaria ya en 2021, mientras que el Ejecutivo de Pedro Sánchez calcula un déficit del 0,4% del PIB en 2021 y haber cuadrado las cuentas en 2022. A su vez, calcula que la ratio de deuda pública podría haber concluido 2019 en el 95,9% del PIB, y se marca la meta de rebajarla al 94,6% este año.
Sustituirá en el cargo a Octavio Granado.
"A veces nos llaman agoreros a la CEOE, pero es lo que hay. Con las cosas de comer no se juega", ha dicho el presidente de la patronal.
Los fondos de pensiones que gestionan las pensiones de los trabajadores del país han acumulado su récord de rentabilidad de la última década.
La AIReF ha publicado, en los últimos años, varios informes sobre las cuentas de la Seguridad Social. ¿Cumplirá con sus propuestas el nuevo ministro?